La batalla de la Montaña Blanca El conflicto estalla en Bohemia, donde la libertad religiosa había permitido a las comunidades católicas y protestantes cohabitar pacíficamente. Para salvaguardar sus derechos, los checoslovacos se rebelan, se separan del Imperio y se entregan a un nuevo soberano en la persona de Federico V, elector calvinista del Palatinado. Fernando II entra en guerra contra Bohemia, buscando el apoyo de los ejércitos españoles, y los checoslovacos son derrotados en la batalla de la Montaña Blanca en 1620. En algunas semanas, todo el país es reconquistado, la soberanía de los Habsburgo restablecida y Federico V es condenado al exilio. El emperador ordena la disolución de la Unión Evangélica.